Un hombre surcoreano fue arrestado tras confesar haber asesinado a su novia en 2008 y haber ocultado su cadáver durante 16 años. El hallazgo del cuerpo, que estaba enterrado bajo cemento y ladrillo en el departamento que ambos compartían, se produjo cuando un operario realizó reparaciones en la terraza. Según el acusado, golpeó a la víctima con un objeto contundente antes de introducir su cuerpo en una maleta, que luego escondió bajo una pila de ladrillos en el tercer piso de un edificio en Geoje, al sureste de Seúl.
El detenido, que residió en el apartamento hasta su arresto en 2016 por consumo de drogas, había mantenido el ocultamiento del cuerpo en secreto. A pesar de que la familia de la víctima no reportó su desaparición hasta 2011, la policía había investigado al hombre anteriormente, quien negó conocer su paradero. La revelación de este crimen ha conmocionado a la sociedad surcoreana, evidenciando las trágicas circunstancias que rodean el caso.